Los sistemas informáticos de cualquier empresa no dejan de crecer, se ocupan de cada vez más cosas y han de ser ampliados por múltiples motivos como mejorar la seguridad o mantener la competitividad. Pero este crecimiento viene con una complejidad inherente que hay que dominar apropiadamente.
Por otro lado, la empresas necesitan estos sistemas prácticamente con unos requerimientos 24×7 en muchos casos, para que sus operaciones puedan seguir funcionando. Especialmente si los clientes consumen servicios online o si la compañía dispone de un sitio de eCommerce, que ha de estar activo 24 horas al día. Cualquier fallo puede costar dinero a la compañía y una forma de prevenir estos fallos, es con una buena monitorización.
La monitorización es la clave para un rendimiento óptimo
La mejor forma de averiguar que algo no va bien o se está torciendo en un sistema informático de cierta complejidad (un servidor, CRM, ERP, servicio en cloud, etc.) es mediante una buena monitorización. Una vez que el sistema funciona bien se crea una baseline a base de KPIs ideales, y un sistema de monitorización controla los datos vitales permanentemente, para averiguar si las KPI están cumpliendo con lo previsto. Los parámetros más comunes que se controlan, entre muchos otros y más específicos, son:
- Consumo de CPU/núcleos/VMs. Un consumo de CPU/núcleos/VM demasiado elevado hará que todo el sistema/proceso en cuestión vaya más lento.
- Consumo de RAM. Alcanzar el límite superior de la RAM asignada suele causar problemas de estabilidad o un impacto severo en la velocidad de funcionamiento.
- Consumo de disco.Quedarse sin espacio en disco es igual de problemático que sin RAM, produciendo ralentizaciones o cuelgues.
- Consumo de ancho de banda. Para sistemas conectados online, como hoy en día lo son la mayoría, el volumen de datos al que se puede acceder por segundo es fundamental. Sin conexión, o con una conexión lenta, se impactan los servicios con diferentes grados de severidad.
Naturalmente hay mucho más KPIs, como el throughput del sistema, el número de procesos en funcionamiento, uso de apps, ataques de seguridad, el tiempo medio de procesamiento de una transacción, etc. El control de estos KPI es especialmente importante en sistemas elásticos, en los que se pueden variar el número de CPUs, RAM, espacio en disco, etc. para que nunca se llegue al límite superior, sino que se asignen más recursos de forma dinámica, si es posible.
Herramientas de monitorización
En vista del enorme número de parámetros que puede ser necesario controlar para averiguar el estado de salud general de un sistema, es importante disponer de una suite de monitorización adecuada como, por ejemplo, Solarwinds. Cubre redes, sistemas, bases de datos, seguridad, servicios y aplicaciones, lo que representa el total de los servicios de TI internos o externos que pueden ser necesarios en una empresa.
Una de las áreas donde la monitorización se utilice con más frecuencias probablemente es la seguridad. Cualquier evento de seguridad debe ser atendido a la mayor brevedad, por el riesgo inherente que puede suponer. Soluciones como Security Event Manager permiten detectar amenazas de forma automática y responder a ellas, monitorizan el sistema de ficheros y tiene herramientas de reporting aptas para compliance, además de herramientas de análisis forense. Con la ayuda de estas se pueden desgranar con todo detalle los logs acumulados, para descubrir qué contribuyó a la situación actual, y que causó exactamente el problema en primer lugar.
¿Qué aportamos desde v-One?
Si la información de monitorización es completa y fiable, se dota a la organización (en especial al departamento de TI) de un arma extremadamente potente para poder reaccionar a eventos que se salgan de lo normal (estipulado en las mencionadas KPI) prácticamente en tiempo real.
En v-One desplegamos la gama de productos de SolarWinds con el propósito de proporcionar a las empresas la posibilidad de ser proactivos e iniciar remediaciones de problemas, antes de que estos alcancen a los usuarios finales o los sistemas de forma perceptible.
Nuestros Servicios Profesionales tienen el Know-How para combinar estas tecnologías con sistemas de automatización, a fin de crear soluciones de corrección automática de errores y problemas, que contribuyan a la estabilidad de los sistemas de la empresa, a reducir el coste de mantenimiento y a mantener un uptime de >99%.
Si añadimos soluciones de reporting también automatizado, resultará mucho más sencillo ver patrones en los comportamientos de usuarios o equipos, para anticiparse a cuestiones estacionales (fines de semana con poca carga, mañanas con más demanda) para optimizar la disponibilidad de los recursos y reducir el OPEX en lo posible.
En resumen, nuestros servicios de despliegue de soluciones de monitorización son una de las bases para tener sistemas de TI con buena salud y una tasa de incidencias efectivas muy baja.